24 Imágenes por Segundo

lunes, 4 de febrero de 2008

Estos niños son raritos: El Otro /The Other (1972)

Hace unos días, en casa, gracias a la magia del DVD, pudimos ver una de las grandes joyas del terror de los 70. Se trata de nada más y nada menos que de “El Otro” (The Other, Robert Mulligan, 1972). La cinta viene a englobar ese fenómeno (producido en la época de los pantalones de campana y música disco) denominado “Terror Psicológico”; un género, bien sea dicho, con obras clave como “El Exorcista” (The Exorcist, William Friedkin 1973) o “La Profecía” (The Omen, Richard Donner 1976) donde el eje común en todas ella era como la maldad ya no era patria potestad de monstruos ni seres de otros mundos sino que podía esconderse dentro de la inocencia de un niño. A ver, niños ( y niñas) cabrones ha habido siempre en el cine. Tenemos como ejemplo a la horrenda Christine Penmark (Nancy Kelly) de “La Mala Semilla” (The Bad Seed, Mervyn LeRoy 1956) que tras sus tiernas ( y enrevesadas) trenzas doradas surgía un ser más indigno que pegar a un padre con una escobilla del WC usada; o quién no recuerda a la repelente Mary Tilford (Karen Balkin) en “La calumnia” (The Children´s Hour, William Wilder 1961) que con su boquita de piñón (o mejor dicho de cañón para misil termonuclear) amargaba la vida de sus profesoras Karen Wright (Audrey Hepburn) y Martha Dobie (Shirley MacLaine). Si, no cabe duda , el cine está lleno de niños y niñas cabrones. Pero si es cierto que cuanto más “ancianos” (cinematográficamente hablando) son esos niños más retorcidos y terribles resultan. Los niños malos de los 90, o de la década actual, son simples aprendices comparados con sus tocayos de Blanco y Negro o Technicolor. Son burdas copias. No asustan ni a la piedras. ¿Alguien se acuerda ya de Henry Evans (Macaulay Culkin) en “El Buen Hijo” (The Good Son, Joseph Ruben 1993) o del vomitivo Junior Healy (Michael Oliver) en “Este Chico es un Demonio” (Problem Child, Dennis Dugan 1990)?

Volviendo de nuevo a “El otro”… Veréis hacía tiempo que no la había vuelto a ver. La última vez cuando en televisión emitían cine como Dios manda (podéis imaginar que de eso ya hace la tira de años…) Guardaba un gran recuerdo de ella, no en todo su contexto en sí, porque entre otras cosas la tenía muy oxidada y sólo rememoraba ciertos detalles turbios que me invitaban a otorgarle un nuevo (y ansiado) visionado. Reconozco que como a otros muchos la tenía mitificada y eso, a veces da un poco de miedo para volver a enfrentarse a ella no sea que por un lado me lleve una desilusión o pierda toda esa magia que la hacía destacar entro otras tantas. He de decir que la reposición no me defraudó en absoluto. Salvo a que ya había varios tics que no conseguían sorprenderme (debido a como han chupado de ellos más de una docena de directores a lo largo de los años, una pena) Quitando este detalle “El Otro” se me mostró tan perturbadora como interesante, tan malsana como bella, tan ingenua como peligrosa. La mano de Robert Mulligan (New York 1925)se hace notar en todos sus planos guardando en cada plano ese aire costumbrista ya visto en “Matar a un Ruiseñor” (To Kill a Mockingbird 1962) otra de sus obras maestras o en “Verano en Luisana” (Man in the Moon, 1991) su última película hasta el momento. En “El Otro” hay muchos toques de cine Europeo sobre todo del cine de Bergman. El ritmo de la trama es pausado por no decir bucólico en algunos momentos. Aparentemente no hay indicios de tensión o terror alguno, todo se narra de forma natural sin buscar efectos de golpe (ni ruiditos, ni portazos, ni orquesta dando sustos con golpes de nota ni cámara mareada al hombro y con unos cuantos frames de menos...) lo que se agradece. La historia de “El Otro” narra la extraña y casi “secreta” relación entre Niles y Holland Perry dos hermanos gemelos (Chris y Martin Udvarnoky) algo raritos y amantes de practicar extraños y esotéricos juegos con el resto de habitantes de su comunidad, aunque sienten cierta predilección por tocar las narices a diferentes miembros de su familia, por cierto emigrantes soviéticos huidos de la revolución Rusa. Todos ellos viven en una granja dentro de una pequeña comunidad de pequeñas casas situadas en mitad de campo. La abuela de los niños Ada (Uta Hagen) siente predilección especial por uno de ellos ya que éste posee la extraña habilidad de sintonizarse con cualquier ser vivo en el que enfoque su mirada. Ella le ha enseñado a hacerlo, es un legado familiar y se siente orgullosa de trasmitirlo a una nueva generación. La madre de los niños sufre una profunda depresión debido a un terrible suceso familiar que oculta con mucho recelo. Su enfermedad le impide hacerse cargo de los suyos y apenas sale de la habitación, si lo hace se siente inquieta ante su entorno y entra en sollozos cuando aparecen ante su mirada un antiguo pozo de agua de la finca. Y hasta aquí puedo leer... He de decir que la película no se ha editado aun en DVD en nuestro país. “El Otro” puede encontrarse en tiendas de importación o en webs especializadas tipo www.amazon.com o www.dvdgo.com. Dispone de subtítulos en castellano y audio en inglés y audio en castellano neutro. Los amantes de las descargas pueden bajársela de donde ya saben en su versión en Inglés con subtítulos o también sin ellos.

Trailer oficial de la película:


1 comentarios:

A las 4 de febrero de 2008, 13:58 , Blogger Lucía ha dicho...

Amo el cine de terror de los 70, y lo peor, que soy poco exigente, yo con fredy Kruegger ya tenía pesadillas para reservas de sueños enteros. Me he visto cientos y cientos desde 'tu madre se ha comido a mi perro' (maliiiiiiisima) a 'CreepShows' (algo asi como pequeñas historias de ¿Terror?) a todo le llaman terror.

Un abrazo,

-Lucia-
www.luciebryce.es

 

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